No es que haya sido muy original al ponerle título a la foto, pero es lo que me vino a la cabeza al mirarla y ver esas piedra solitaria en primer plano.
La foto se realizó en la playa de La Arena al atardecer de un frío día de invierno. Aquel atardecer a punto estuvo de costarme un disgusto cuando una ola me sorprendió y estuvo muy cerca de llevarse todo el equipo con ella. Por suerte, anduve rápido de reflejos y todo quedó en un susto y en una limpieza a fondo del material.
Esta de hoy es la única foto que he salvado de aquella jornada. Después del susto, se me quitaron las ganas de seguir haciendo fotos… Aún así, el atardecer tampoco estaba dando mucho juego, así que creo que me retiré a tiempo.
Os dejo con la foto. Laster arte!