Una tarde memorable aquella de septiembre de 2012…
No suelo ser amigo de las quedadas fotográficas con mucha gente, sobre todo porque habitualmente degeneran en reuniones sociales en las que se dejan de lado las fotos. Soy de los que piensa, como en el chiste, que, «cuando setas, setas y cuando Rolex, Rolex…». Si hay que quedar para tomar unas cervezas con los amigos del mundo de la fotografía y de paso charlar sobre nuestra afición, se queda, y si hay que quedar para hacer fotos, se queda también, pero a eso, a hacer fotos! 🙂 Afortunadamente en el grupo «Canonikos» sabemos diferenciar o combinar muy bien estos factores y me quedó claro en aquella ocasión en Gaztelugatxe.
Llevábamos un tiempo publicando juntos la revista, nos conocíamos de las redes sociales, las páginas y foros fotográficos, pero algunos no nos conocíamos aún en persona, así que aquella fue una magnífica oportunidad para hacerlo. Hubo incluso orden del día: Primero fotos y luego cena con charla. Pedazo de empanada que se curró Jonathan!!
A la hora de las fotos nos dividimos en varios grupos. Varios compañeros decidieron ir hacia el lado de Aketxe, otros se quedaron junto a las escaleras y otros pocos decidimos ir frente a la Catedral, el «templo Canóniko».
Una vez abajo, disfrutamos de un atardecer glorioso, de esos que pocas veces se ven. Fue eterno… Colores por doquier. La marea no estaba en su punto óptimo para esta localización y mi gusto, pero desde la lejanía pudimos hacer unas cuantas fotos salvando un fuerte contraluz.
De esta sesión salió la foto titulada «No pasa el tiempo» que presenté a varios concursos y tuvo la suerte de ser premiada con una Mención de Honor en el Memorial María Luisa y de ser finalista del BBC Wildlife Photographer of the year.
Hoy me apetece compartir con mis lectores una serie de fotografías de aquella misma sesión. Las hay verticales y horizontales en la serie. Hay algunas de antes de ponerse el sol, otras pocas de después de la puesta… En fin, hay un poco de todo.
La técnica utilizada en todas ellas es la habitual. Trípode, cable disparador, nivel de burbuja, filtro degradado inverso y filtro de densidad neutra. De las de esta serie ninguna lleva filtro polarizador, sí lo llevaba en cambio la foto premiada «No pasa el tiempo», algo por lo que en alguna ocasión he recibido alguna crítica, pero creo que el plus de saturación natural que le otorga el uso de dicho filtro bien merece cualquier crítica o controversia porque en este caso creo que el fin justifica los medios.
La verdad es que tengo un montón de fotos de aquel día, la mayoría sin revelar aún en el disco duro. Hoy os muestro las que he revelado y publicado en las webs de fotografía habituales.
Os dejo con la serie. Laster arte!