Continuamos con la serie iniciada la semana pasada realizada en otoño de 2012 en Arribolas. Hoy le toca el turno a una de las fotos horizontales que realicé aquella mañana de viento sur.
Es una foto en la que traté de simplificar la composición buscando una cantidad reducida de elementos. Se trata de una localización en la que las rocas abundan así que tuve que buscar durante unos momentos las que necesitaba para completar la foto. Una vez encontradas coloqué el trípode de que las rocas elegidas fueran formando una especie de camino hacia el fondo de la toma, presidido una vez más por el cabo Ogoño. Creo que los reflejos coloreados que encontré sobre la piedra más grande le dan un pequeño valor añadido. La verdad es que es una delicia encontrar brillos como ese sobre las rocas húmedas.
La foto tiene 13 segundos de exposición a F16 e ISO100 compensando la exposición con un tercio de paso negativo. La focal elegida fue de 30mm. Como casi siempre, utilicé un filtro ND de 3 pasos de cristal de la marca Lee y un degradado inverso de 3p pasos. Todo ello sobre la 5d Mark II y el 17-40 de Canon.
Os dejo con la foto. Laster arte!