Hoy que parece que el sol vuelve a asomar el hocico por Euskadi voy yo y pongo otra foto invernal en el blog… ¡No tengo remedio!
En esta ocasión se trata de una foto curiosa. La hice el mismo día que «Karrantza first snow», la protagonista de una de las anteriores entradas, cuando ya nos retirábamos hacia el coche por miedo a quedar atrapados por la nieve. Al pasar por primera vez por este lugar llamaron mi atención estos árboles solitarios sobre la ladera así que decidí que a la vuelta montaría el tele para hacerles un retrato. Así fue.
No se si decir que tuve suerte de que parase de nevar cuando volvimos a pasar por el lugar. Tal vez con unos copos de nieve cayendo la toma habría quedado mejor, pero probablemente si hubiese estado nevando estos árboles no se verían desde donde yo estaba. ¿Quién sabe? Aprovechamos para hacer unas cuantas fotos desde aquel punto y la primera que hice fue esta que ya había previsualizado a la subida. Llevaba montado el 24-105 en la cámara así que probé a encuadrar la imagen que tenía en mente. Pude comprobar que no era necesario pasar al 70-200 pues con el 24-105 a tope de tele podía cubrir la escena y así lo hice. A 105mm, f8, ISO100 y 1/80 de velocidad obtuve esta toma que os presento hoy.
Mi intención era reflejar las duras condiciones a las que están sometidos estos árboles en medio de una ladera desnuda, solos ante los temporales, el viento, el sol, etc… Hice varias pruebas con encuadres más abiertos pero ninguna me convenció in situ. La idea era que los árboles aparecieran aislados y solitarios en esa inclinada colina. Creí que con un encuadre más abierto podría reflejar mejor esas condiciones, pero aparecían algunos elementos en escena cuya presencia no me terminaba de llenar, así que me quedé con esta toma.
La parte superior de la escena es la tormenta de nieve que nos estaba dejando atrás en ese momento. Me habría gustado tener una capa más gruesa pero aquellas fueron las primeras nevadas de otoño de 2012 y el espesor aún era escaso. Pudimos llegar en 4×4 hasta aproximadamente 1km de distancia del lugar, pero supongo que con más nieve será imposible acercarse tanto. Seguro que en unas pocas horas aquella pista quedó impracticable…
Os dejo con la toma. Laster arte!