Esta foto de hoy la conseguí en compañía de mi amigo Jesús Bravo en un conocido bosque del Alto Asón. Tuvimos la suerte de encontrar algo de niebla en aquella fría mañana otoñal, algo no demasiado frecuente en este lugar. Lo cierto es que lo pasamos como enanos buscando rincones. He de confesar que mi cosecha fotográfica dejó bastante que desear aquel día y esta «lost in the forest» es probablemente la única foto que salvo de la quema general… Ya sabéis que hay días en los que se tiene el santo de cara y otros en los que no. Creo que fue uno de esos en los que no atiné demasiado.
Recorriendo la inmensidad del bosque encontré este haya caída que inmediatamente me indujo a fotografiarla. La forma en la que yacía el tronco sobre el suelo me invitó a componer la foto con el tronco como guía visual de la misma, intentando que nos llevase a observar la profundidad del bosque. Vosotros diréis si acerté o no.
Para realizar la toma utilicé el angular 17-40-L de Canon con un polarizador circular, con diafragma cerrado buscando maximizar la profundidad una vez más.
Espero que sea de vuestro agrado. Laster arte!