El pasado día 19 me acerqué unos instantes a La Cercada. Tan solo disponía de unos minutos así que fui al grano.
Quería captar la formación rocosa de esta zona con las flores de las argomas en primer plano y enmarcarlo todo con el cielo espectacular que había visto antes de decidir desplazarme hasta allí.
La cuestión no entrañaba ninguna dificultad especial. Tan solo había que dar con alguna flor para meter en el encuadre y tras varios minutos de búsqueda di con la que estaba buscando. Ubiqué el trípode a escasos centímetros de ella y con el Sigma en angular a 10mm, f13, ISO 100 y 8 segundos de exposición capturé la foto que había ido a buscar allí. En esta ocasión utilicé tres filtros: Un polarizador circular, un filtro de densidad neutra de 3 pasos y el degradado inverso «singh ray».
Las fotos de La Cercada son un reto para mi desde que hace ya algún tiempo realizase una toma con unas plantas en primer plano y un cielo azul que a mi amatxu le encantó. Le gustó hasta tal punto que un tiempo después me pidió una copia en grande para poder pintarla al óleo… ¡Os podéis imaginar mi satisfacción! Desde entonces, siempre que vuelvo allí tengo la certeza de que haga la foto que haga en ese lugar tendré su sonrisa de aprobación esperando. Y es que no hay satisfacción más grande que el reconocimiento a tu esfuerzo, dedicación y empeño por parte de alguien cercano. Con esta foto que hoy os presento lo conseguí una vez más. Zuretzat ama!