Pero no de una persona, sino de un ave.
Seguramente será una de las aves mas fotografiadas del norte. Se trata de un aguila calva del parque de la naturaleza de Cabárceno, que día sí y día también aguanta estóicamente a los miles de personas que nos acercamos a su vera con intención de inmortalizarla.
Resulta un ave ciertamente atractiva para fotografiar. Su plumaje bicolor y su prominente pico la hacen realmente bella.
Técnicamente esta foto no tiene mucha historia. La realicé con el 70-200 a 200mm, f3’5 y 1/400 segundos de velocidad. Apoyé el objetivo en una estaca que hay próxima a las aves y esperé a que posara para mi. Hay que andar atento porque gira la cabeza constantemente.
Os dejo con la foto. Intentaré informaros esta noche o mañana de alguna cuestión relacionada con la fotografía. Un saludo.